viernes, 18 de septiembre de 2015

DESCARGO DE CONCIENCIA (1930-1960), PEDRO LAÍN ENTRALGO

Cultura era, por su parte, cuanto en mi alma habían metido mis primeros maestros, las ocasionales lecciones de mi padre, mis incipientes lecturas infantiles; pero sólo con los decisivos descubrimientos que iba a ofrecerme el Instituto soriano- la “clase” monográfica y regular, el libro de texto temáticamente diferenciado, la conciencia de una situación de la inteligencia a un tiempo caminante y ascendente; la escuela, la segunda enseñanza y al fondo, como término supremo, la Universidad-, sólo así me llegó en vivo la experiencia de haber penetrado realmente en el inagotable mundo de aquella. Cuando es lúcidamente poseída, había de enseñármelo mucho después Ortega, la cultura brinda al hombre claridad, ordenación, precisión y seguridad vital, una seguridad que por paradójica y esencial exigencia lleva en su seno el problematismo de la tendencia hacia un nivel superior




Descargo de conciencia (1930-1960), Barral, pág 19

viernes, 4 de septiembre de 2015

ANTE FINEM DOCENDI, NEMESIA MATARREDONA VIZCAÍNO

Más años que viviera Jesucristo
Textos antiguos he ido deshaciendo
Y, tozuda Penélope, tejiendo
Y todo fue un tejer visto y no visto.

Tempus fugit paulatim vulnerando
Del paso de los años no me quejo
Todos somos platónicos reflejos
Que las terribles parcas van cegando.

Mi queja es que el oficio ya no basta
En estos lares de brillante nada
En que se han convertido los telares.

Perdida está la conmovida casta
Y están las Hilanderas desbordadas.
¡Tejemos telas tales tan triviales!


Homenaje a la fiesta del soneto celebrada en el Ateneo de Sevilla en 1912,  pág 188