Al contrario que Hirsch, eran
muchos los que estaban muy contentos con la apertura de la escuela porque ahora
los niños no andaban corriendo con los palos a lo largo de las vallas atronando
el mundo. Mensch dividió los estudios por días: los domingos, los lunes y los
martes eran los días dedicados a la cultura, durante los que los niños tenían
que aprenderse de memoria poemas en idiomas que no conocían; los miércoles, los
jueves y los viernes eran los días de la ‘Wissenschaft’, en los que estudiaban
las ciencias
La chica sobre la nevera, Siruela, pág 54
Espero que los que estaban contentos con la apertura de la escuela, lo estuvieran también por lo que los niños iban a aprender allí, no solo porque dejaban de estar en la calle dando con palos en las vallas.
ResponderEliminarPues habrá de todo. El otro día estuve en una charla de Fernández Enguita sobre el papel de la escuela y también hablaba de eso
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